No podíamos cerrar el año 2019 sin dejar de presentar nuestra perspectiva para el venidero año nuevo 2020. Estábamos indecisos sobre cual tema tratar para el día final de este año; incluso no pensábamos interrumpir nuestros días de vacaciones pero la sempiterna inquietud de pensar por el mejor futuro de Venezuela nos trajo de vuelta a los quehaceres de los condominios, su proyección y futuro para el año próximo y así nos sentamos nuevamente en nuestra computadora para compartir algunas reflexiones con ustedes, nuestros amables seguidores.
La protección y rescate de la propiedad privada en Venezuela:
Este es uno de los factores que más nos ha preocupado y ocupado en el pasado y en lo atinente a la propiedad privada condominial, el esfuerzo debe ser más vigoroso, requiere de una fuerza de voluntad comunitaria, que marche unida hacia un solo objetivo: evitar la vulneración de la integridad física y jurídica de los condominios, por quien sea, erradicando las acciones de hecho en su contra y que terminan por arruinando tanto su estructura física, así como la propiedad particular y enterrando el valor inmobiliario que tanto costó para sus copropietarios formarlo.
Ello pasa por el respeto del estado de derecho, iniciando por el cambio de voluntades de los propios copropietarios quien en no pocas ocasiones se ponen al margen de la ley, fomentando la anarquía y la anomia, dividiendo criterios y creando grupos sectarios en el condominio que se tiran piedras entre sí, olvidándose que tienen el deber de trabajar juntos por el mejor condominio posible, resolviendo los problemas que surjan a la luz del derecho y de la justicia y la equidad. Cuando se entienda que debemos respetar los documentos de condominios y los acuerdos de las asambleas de propietarios que apoyan los criterios legales y constitucionales de orden público y de justicia, amén de convivencia pacífica, entonces podremos decir que fortalecemos los condominios y dejaremos de pensar que son un accidente marginal en nuestras vidas.
Los condominios son a nuestro criterio, la mejor oportunidad del ejercicio de la expresión democrática de una nación, porque permite poner en práctica sus principios en pro de los intereses de la mayoría de sus copropietarios, siempre apegados a las reglas que los regulan. Son la expresión pequeña del país; no por ello, no dejan de tener gran importancia.
Nuestra propuesta para el 2020: la creación de una gran organización condominial venezolana:
Desde el año 2005 propusimos ante la Asamblea Nacional de Diputados nuestro proyecto de Ley Orgánica de Comunidades Inmobiliarias; varios son los órganos que ella crea para fortalecer la propiedad privada en Venezuela y entre los cuales destaca la organización comunitaria a través de la Federación Nacional de Comunidades Inmobiliarias. Ya están redactados sus documentos y en el próximo año aspiramos a crear los distintos capítulos en cada uno de los Estados del país. La idea es crear un organismo ejecutivo de desarrollo del régimen comunitario que desarrolle las distintas especies de comunidades inmobiliarias que hay en el ordenamiento jurídico venezolano, entre ellas, el condominio.
Nuestro bufete de abogados “Viso, Rojas y Asociados, Asesores Jurídicos, Sociedad Civil sin fines de lucro”, le dará el soporte jurídico a esta entidad nacional que persigue aglutinar, capacitar, asesorar y proteger a los propietarios de inmuebles en Venezuela, quienes son quienes le dan vida; le ponen rostro, alma y corazón e identidad, a las comunidades donde habita,
Una organización descentralizada, especializada en el manejo de la dinámica de la convivencia democrática y pacífica es más que necesaria en la realidad social del país; y hacia ello avanzaremos en el próximo año y esperamos que nos acompañen. Quienes estén interesados deben ponerse en contacto con nosotros por todos los medios de comunicación de los cuales disponemos para difundir nuestros mensajes.
Este espacio es patrocinado por Asesorías Pro Condominios C. A., empresa socialmente responsable. Educando a las comunidades inmobiliarias de Venezuela por un mejor vivir.